Así lo resaltó la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, al encabezar la Cuadragésima Novena Sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública, realizada en Palacio Nacional.
A dicha reunión de trabajo asistió en representación del presidente Andrés Manuel López Obrador, la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján.
La secretaria Rosa Icela Rodríguez expresó que para el gobierno es importante el trabajo coordinado, por lo que reconoció el esfuerzo de las y los gobernadores para brindar mayor seguridad a la población; así como de policías, marinos, soldados y agentes.
Destacó la disminución de delitos como el secuestro en 77.6 por ciento y el feminicidio en 28.7 por ciento, así como homicidios, robos, hurto de hidrocarburo y también bajaron los delitos del fuero federal.
Indicó que las operaciones de inteligencia y la coordinación entre los tres órdenes de gobierno permitieron incautar armas de fuego, fentanilo, metanfetamina, destruir laboratorios y capturar delincuentes de todos los grupos criminales.
Asimismo, se creó la Comisión para la Atención del Delito de Homicidio Doloso (CONAHO), que brinda apoyo jurídico y táctico a las fiscalías y procuradurías de los estados. La Coordinación Nacional Antisecuestro (Conase) también colabora.
La coordinadora del Gabinete Nacional de Seguridad manifestó la importancia de la presencia de la fuerza armada permanente, lo cual ha generado mayor confianza entre la ciudadanía.
Resaltó la aplicación de la estrategia especial para la construcción de la paz en 50 municipios y las acciones de prevención con el Desarme Voluntario y las Ferias de Paz.
Consideró un logro el avance en la obtención del Certificado Único Policial (CUP), ya que cuando inició la administración se tenía 20.8 por ciento de certificación. Actualmente, el porcentaje creció a 84.1 por ciento.
La servidora pública federal enumeró algunas acciones emprendidas para alcanzar la pacificación, entre ellas, la realización del Tianguis del Bienestar en las comunidades con mayor pobreza del país; y las estrategias para garantizar que mujeres y niñas vivan libres de violencias, así como el desarrollo del plan Redes por la Prevención de las Violencias y las Adicciones en las Escuelas.
Además, con la denuncia ciudadana al 089, y en acuerdo con las empresas de telefonía móvil, se avanza en la prevención y erradicación del delito de extorsión dentro de los centros penitenciarios.
Para personas privadas de la libertad que no cometieron delitos graves, por instrucción presidencial se realizan gestiones para que puedan obtener su libertad.
Resaltó que en los últimos cinco años se han entregado, a estados y municipios, recursos provenientes del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP) y del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de los Municipios y de las Demarcaciones Territoriales (FORTAMUN). Y, recientemente, del Fondo Permanente para el Fortalecimiento de las Instituciones de Seguridad Pública (FOFISP).
Para 2024, agregó, los recursos sumarán 127 mil 257 millones, 292 mil 196 pesos en conjunto de los tres fondos. “Nuestro propósito es que la gente pueda hacer efectivos sus derechos a la seguridad, a vivir libre de violencia, con paz y tranquilidad”, dijo la secretaria Rosa Icela Rodríguez.
Refirió que las Mesas de Construcción de Paz y Seguridad son columna vertebral de la Estrategia Nacional de Seguridad, ya que en ellas se atienden las problemáticas de inseguridad que se vive en algunas zonas específicas.
La secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján, sostuvo que cambiar radicalmente la estrategia de seguridad ha dado buenos resultados. Señaló que, a pesar de lo difícil que es modificar la tendencia y lograr la pacificación, se ha avanzado contundentemente.
Subrayó que los pilares de este enfoque son:
1. No delegar el tema de la seguridad; el presidente Andrés Manuel López Obrador es quien coordina todos los días el Gabinete de Seguridad. Este ejercicio se replica en las entidades federativas y también algunas reuniones regionales, en las que, al participar los municipios, es posible realmente avanzar todas y todos juntos.
2. Ante el deterioro de la policía federal, el establecimiento de la Guardia Nacional (GN) con más de 128 mil elementos en el país, cuyo trabajo en conjunto con la Sedena y la Semar ha sido fundamental para avanzar en la pacificación.
3. Atender las causas, por lo cual atacar la pobreza y la monstruosa desigualdad ha sido el objetivo primordial a través de los programas de Bienestar. Ello, ha permitido, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), sacar a más de 5 millones de personas de la pobreza.
En este contexto, recalcó la titular de Gobernación, hoy con los incrementos salariales y la política laboral, “hemos incrementado en casi 20 por ciento los ingresos de las familias y eso ha sido quizá el elemento más importante de la estrategia de seguridad”.
Enfatizó que, si bien los resultados se dicen en cifras, son sumamente complejos, como lo es hablar de 19 por ciento menos de homicidios. “Es toda una hazaña”.
La encargada de la política interior del país aseguró que se seguirá con el avance al fortalecer cada vez más a las policías, dignificar los salarios e intensificar la capacitación. “Entender que en el tema de seguridad debemos participar todas y todos, no solamente es un asunto de los ejecutivos, por supuesto de las fiscalías, pero también del Poder Judicial.
“Debe haber un compromiso de jueces, de juezas, magistradas, magistrados, ministros, de entender que todos tenemos que construir un país donde no se permita la impunidad. Y por eso hemos venido insistiendo en el exceso de formalismos, que a veces puede llevarnos a un terreno de impunidad. Y si seguimos construyendo estos espacios de coordinación, entonces vamos a garantizar la paz y la tranquilidad, como lo hemos venido haciendo”, indicó.
Lo mismo –dijo– en el tema de protección civil, la estrategia también cambió. El Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales (Fonden) era una herramienta más para saltarse todos los obstáculos y adjudicar directamente.
“Hemos cambiado la lógica, lo podemos ver -quizá- de manera más clara en el caso de Acapulco. No solamente el día que sucedieron los hechos, al día siguiente ya estaba el presidente de México en Acapulco, atendiendo el huracán con todas las instituciones, por supuesto Protección Civil y todos los presentes. No ha habido un solo día que no haya reuniones de coordinación”, resaltó.